Instrumentación y Componentes-Inycom forma parte del nuevo proyecto europeo Sinnogenes dentro del que se está trabajando para potenciar el uso de del hidrógeno como fuente de energía y en el desarrollo de herramientas de almacenamiento energético de origen renovable para lo que se contará con un piloto en el Parque Tecnológico de Walqa.
Instrumentación y Componentes, a través del área de desarrollo de proyectos de Energía (Inycom Energy), continúa avanzando en líneas de trabajo ya emprendidas en otros proyectos de gestión energética a nivel europeo, que han permitido disponer de una serie de módulos o herramientas para la gestión energética de islas energéticas, siendo una de ellas Walqa, en Huesca. Precisamente, en este parque tecnológico la compañía ya era responsable de otro proyecto piloto.
Ahora, con Sinnogenes (Storage Innovations for Green Energy Systems)) lo que «queremos es darle continuidad y nuevas oportunidades. El nuevo proyecto busca desarrollar herramientas para la gestión energética, pero más enfocadas al almacenamiento energético», indica Pilar Gascón, ingeniera industrial en el departamento de I+D de Inycom.
«En Walqa ya tenemos monitorizados y gestionamos todos los activos del parque en términos de producción y consumo y teníamos también ya el almacenamiento de hidrógeno. Vimos la oportunidad» con este nuevo proyecto de seguir avanzando, añade la ingeniera industrial.
Dentro de Sinnogenes, dotado con 9,6 millones de euros y la participación de 27 partners, se van a desarrollar diferentes herramientas de almacenamiento de origen renovable (hidrógeno) con diferentes tecnologías, ya que el proyecto contará con varios pilotos España, Portugal, Alemania, Grecia y Suiza.
En el caso de Walqa, con más de 500 empleados y 14 edificios, el proyecto tendrá la particularidad de trabajar con el almacenamiento de hidrógeno y también en combinación con fuentes de eléctricas. En la actualidad, el parque tecnológico ya es una microrred conectada al sistema eléctrico por un nodo en uno de los límites del sistema y cuenta con recursos renovables para cubrir sus consumos.
De este modo, se trabajará en el desarrollo de herramientas de gestión y en su integración efectiva de varios tipos de sistemas de almacenamiento en la cadena de valor en términos de energías renovables y sectores de demanda. Al mismo tiempo, se garantizará la compatibilidad de los sistemas y el cumplimiento de la normativa de almacenamiento de energía.
En este proyecto, con una duración de cuatro años, Inycom también se encargará del desarrollo del software para el despacho óptimo de energía, integración de la microrred y la visualización de los módulos de software.
Hidrógeno más fotovoltaica
La empresa aragonesa contará con la colaboración de la Fundación del Hidrógeno, que se ocupará de proveer las infraestructuras de hidrógeno, así como de Schneider Electric, que aportarán los microcontroladores de hardware de los nuevos elementos que haya que adicionar a los ya existentes. Estos dispositivos digitales permitirán a su vez obtener nuevos datos en tiempo real en términos de almacenamiento del sistema para integrarlos en el SCADA existente desarrollado por Inycom.
Es una versión 2.0 del sistema de gestión de energía
«En estos momentos, hay varias tecnologías instaladas como fotovoltaica, eólica e hidrógeno en el sistema SCADA, para la gestión energética, y tenemos sensores desplegados para monitorizar la energía y el consumo para saber gestionar el almacenamiento», indica Pilar Gascón. Este proceso se está haciendo en tiempo real y los datos se están lanzando al cloud. A partir de ahí, ya se puede decidir cómo actuar sobre el parque y saber, por ejemplo, qué cantidad de almacenamiento o no está en curso.
«El siguiente paso -señala Gascón-, es actualizar todo el sistema SCADA, por posibles cambios en la instalación, además de renovar el electrolizador», entre otros elementos, e integrar los nuevos sensores y microcontroladores.
La Unión Europea está apostando por este tipo de herramientas
«Es como una versión 2.0 del sistema de gestión de energía». El piloto también está orientado hacia un sistema de gestión energética flexible y de almacenamiento, lo que «nos permite actuar cuando las renovables no están disponibles».
Este piloto se diferencia de otros en la combinación de hidrógeno con fotovoltaica ya que, en otros casos, se está optando por almacenamiento químico o también mecánico, entre otros tipos de almacenamiento. «Aplicamos las últimas tecnologías en hidrógeno y en producción con fotovoltaica para el hidrógeno verde y almacenar. El combo fotovoltaica e hidrógeno se está intentando explotar porque es una buena combinación».
Son herramientas novedosas por las que, además, se está apostando desde la Unión Europea con el fin de avanzar en la gestión de activos de almancenamiento, y que se pueden ir probando a través de estos pilotos para, posteriormente, escalarlas.
El proyecto permitirá así poner a prueba la maximización de la fuentes renovables existentes y previstas y la integración de la microrred de almacenamiento con hidrógeno verde haciendo uso de toda la infraestructura existente y con el fin de llevarla al siguiente nivel para ponerla en servicio de la comunidad, minimizar costes y refuerzos de la red de distribución.